WILKIE COLLINS Y LA PIEDRA LUNAR (Y 2)
Wilkie Collins era un escritor de folletines, pero esto en modo alguno supone desdoro o desprecio hacia su obra, ya que al igual que su amigo Charles Dickens o el español Benito Pérez Galdós, compuso auténticas obras maestras de la narrativa publicadas de forma seriada, en revistas y publicaciones periódicas.
Uno de esos magistrales y maravillosos folletines es, precisamente, La Piedra Lunar (The Moonstone, 1868), del que ya comenzamos a hablaros en una entrada anterior de este blog.
La presente obra está cuidadosamente estructurada, como lo están todas las novelas de Collins. Cuando fue publicada en forma de libro se dividió en dos volúmenes, con la siguiente estructura:
VOLUMEN I:
Prefacio [Donde Collins define a esta novela como 'experimento psicológico' y explica algunos detalles de la realidad que le sirvieron como cimientos en los que basar su novela].
PRÓLOGO: LA TOMA DE SERINGAPATAM (1799) (Extracto de una carta familiar) [Donde se explican los antecedentes del famoso diamante hindú de color ambarino, sobre el que pesa una terrible maldición, es decir, cómo llegó a parar a manos del Coronel Herncastle].
LA HISTORIA. PRIMERA ÉPOCA:
PÉRDIDA DEL DIAMANTE (1848). Los hechos, según Gabriel Betteredge, mayordomo al servicio de Lady Julia Verinder.
VOLUMEN II:
DESCUBRIMIENTO DE LA VERDAD (1848-1849). SEGUNDA ÉPOCA:
Los hechos según el testimonio de varios testigos.
PRIMERA NARRACIÓN:
A cargo de miss Clark, sobrina del difunto Sir John Verinder.
SEGUNDA NARRACIÓN:
A cargo de Mathew Bruff, abogado, de Gray's Inn Square.
TERCERA NARRACIÓN:
A cargo de Franklin Blake.
CUARTA NARRACIÓN:
Fragmentos del diario de Ezra Jennigns.
QUINTA NARRACIÓN:
Retoma el hilo de la historia Franklin Blake.
SEXTA NARRACIÓN:
A cargo del sargento Cuff.
SÉPTIMA NARRACIÓN:
De una carta escrita por mister Candy.
OCTAVA NARRACIÓN:
A cargo de Gabriel Betteredge.
EPÍLOGO: HALLAZGO DEL DIAMANTE.
1. Informe del subalterno del sargento Cuff (1849).
2. Informe del capitán (1849).
3. Informe de mister Murthwaite (1850) (De una carta escrita a mister Bruff).
Ésta es la estructura desglosada de la novela de La Piedra Lunar. Como vemos, aparecen múltiples narradores aunque, como en el caso de los Evangelios, son sólo cuatro los más destacados e importantes, a saber: El estupendo mayordomo Gabriel Betteredge; Drusilla Clark, prima de Rachel Verinder, y mujer de moral y religión muy estrictas; Mister Bruff, el abogado de la familia, y por último, Franklin Blake, primo de Rachel y su pretendiente. Por supuesto, hay muchos más personajes.
Los personajes principales son: Rachel Verinder, la heredera del diamante conocido como la 'piedra lunar'; los antes mencionados Gabriel Betteredge, mayordomo, Franklin Blake, primo de Rachel y pretendiente suyo, el abogado Mr. Bruff y Drusilla Clark, otra prima de Rachel; también están Godfrey Ablewhite, otro primo de Rachel, dedicado a la filantropía; Rosanna Spearman, dama del servicio de Rachel y ladrona reformada; el Dr. Candy, médico de la familia, y su asistente, Ezra Jennings; por último, estarían los tres hindúes funámbulos y, por supuesto, el detective, el sargento Cuff.
A mi humilde entender, los caracteres más interesantes de la novela son los del mayordomo Betteredge, aficionado total y consumado a la novela Robinson Crusoe, que empieza su relato una y otra vez, de forma graciosísima; la joven Rosanna Spearman, el personaje más trágico y entrañable de la obra, con cierta deformidad física, pero no de carácter y, sobre todo, el sargento Cuff, amante del cultivo de las rosas y primer detective en sentido moderno de toda la literatura inglesa.
En conjunto, la novela es un alarde continuado de ingenio, maestría narrativa y retrato de ambientes, situaciones y personajes. Una obra sublime y magistral, no sólo del género policial o detectivesco, sino de la novelística en general. No en vano el afamado poeta y crítico T. S. Eliot, que tanto alabó esta novela, llegó a decir que las obras de Collins, y ésta en especial, serían siempre para los novelistas modernos una fuente inagotable de recursos y de trucos narrativos.
Merece muchísimo la pena que los lectores os acerquéis a ella. Por eso os invito a que en algún momento de vuestras vidas abráis las páginas de esta novela: seguro que os deleitará de principio a fin, y os sorprenderá sobremanera su trama y el final de la obra. A mí me quedará la satisfacción de habérosla recomendado.
Uno de esos magistrales y maravillosos folletines es, precisamente, La Piedra Lunar (The Moonstone, 1868), del que ya comenzamos a hablaros en una entrada anterior de este blog.
La presente obra está cuidadosamente estructurada, como lo están todas las novelas de Collins. Cuando fue publicada en forma de libro se dividió en dos volúmenes, con la siguiente estructura:
VOLUMEN I:
Prefacio [Donde Collins define a esta novela como 'experimento psicológico' y explica algunos detalles de la realidad que le sirvieron como cimientos en los que basar su novela].
PRÓLOGO: LA TOMA DE SERINGAPATAM (1799) (Extracto de una carta familiar) [Donde se explican los antecedentes del famoso diamante hindú de color ambarino, sobre el que pesa una terrible maldición, es decir, cómo llegó a parar a manos del Coronel Herncastle].
LA HISTORIA. PRIMERA ÉPOCA:
PÉRDIDA DEL DIAMANTE (1848). Los hechos, según Gabriel Betteredge, mayordomo al servicio de Lady Julia Verinder.
VOLUMEN II:
DESCUBRIMIENTO DE LA VERDAD (1848-1849). SEGUNDA ÉPOCA:
Los hechos según el testimonio de varios testigos.
PRIMERA NARRACIÓN:
A cargo de miss Clark, sobrina del difunto Sir John Verinder.
SEGUNDA NARRACIÓN:
A cargo de Mathew Bruff, abogado, de Gray's Inn Square.
TERCERA NARRACIÓN:
A cargo de Franklin Blake.
CUARTA NARRACIÓN:
Fragmentos del diario de Ezra Jennigns.
QUINTA NARRACIÓN:
Retoma el hilo de la historia Franklin Blake.
SEXTA NARRACIÓN:
A cargo del sargento Cuff.
SÉPTIMA NARRACIÓN:
De una carta escrita por mister Candy.
OCTAVA NARRACIÓN:
A cargo de Gabriel Betteredge.
EPÍLOGO: HALLAZGO DEL DIAMANTE.
1. Informe del subalterno del sargento Cuff (1849).
2. Informe del capitán (1849).
3. Informe de mister Murthwaite (1850) (De una carta escrita a mister Bruff).
Ésta es la estructura desglosada de la novela de La Piedra Lunar. Como vemos, aparecen múltiples narradores aunque, como en el caso de los Evangelios, son sólo cuatro los más destacados e importantes, a saber: El estupendo mayordomo Gabriel Betteredge; Drusilla Clark, prima de Rachel Verinder, y mujer de moral y religión muy estrictas; Mister Bruff, el abogado de la familia, y por último, Franklin Blake, primo de Rachel y su pretendiente. Por supuesto, hay muchos más personajes.
Los personajes principales son: Rachel Verinder, la heredera del diamante conocido como la 'piedra lunar'; los antes mencionados Gabriel Betteredge, mayordomo, Franklin Blake, primo de Rachel y pretendiente suyo, el abogado Mr. Bruff y Drusilla Clark, otra prima de Rachel; también están Godfrey Ablewhite, otro primo de Rachel, dedicado a la filantropía; Rosanna Spearman, dama del servicio de Rachel y ladrona reformada; el Dr. Candy, médico de la familia, y su asistente, Ezra Jennings; por último, estarían los tres hindúes funámbulos y, por supuesto, el detective, el sargento Cuff.
A mi humilde entender, los caracteres más interesantes de la novela son los del mayordomo Betteredge, aficionado total y consumado a la novela Robinson Crusoe, que empieza su relato una y otra vez, de forma graciosísima; la joven Rosanna Spearman, el personaje más trágico y entrañable de la obra, con cierta deformidad física, pero no de carácter y, sobre todo, el sargento Cuff, amante del cultivo de las rosas y primer detective en sentido moderno de toda la literatura inglesa.
En conjunto, la novela es un alarde continuado de ingenio, maestría narrativa y retrato de ambientes, situaciones y personajes. Una obra sublime y magistral, no sólo del género policial o detectivesco, sino de la novelística en general. No en vano el afamado poeta y crítico T. S. Eliot, que tanto alabó esta novela, llegó a decir que las obras de Collins, y ésta en especial, serían siempre para los novelistas modernos una fuente inagotable de recursos y de trucos narrativos.
Merece muchísimo la pena que los lectores os acerquéis a ella. Por eso os invito a que en algún momento de vuestras vidas abráis las páginas de esta novela: seguro que os deleitará de principio a fin, y os sorprenderá sobremanera su trama y el final de la obra. A mí me quedará la satisfacción de habérosla recomendado.
Comentarios
ahora estoy a mitad de "las dos torres". Todavía nos queda un largo camino que recorrer, y encima llevamos a Gollum de acompañante. Difícil pensar por el momento en la siguiente aventura. A lo mejor no conseguimos destruir el anillo, como para liarnos a leer durante el trayecto.
Ando liado, cierto.
Un abrazo
Un abrazo.
Un abrazo.
parece que es un experto Ud en traiciones. Al menos en traiciones escritas, no me entienda Ud mal.
Es curioso ver cómo Saruman y Sauron reinan ahora en Isengard. Las tierras son áridas, los árboles están muertos o ya no dan frutos, y están pobladas esas tierras por medio-orcos y hombres incapaces de ver el verdadero rostro de Saruman.
¿Indiferencia? Por supuesto. Pero cuando uno lee el Señor de los Anillos no puede dejar de comparar a Saruman con personajes reales de voz melodiosa y encantadora pero de oscuro corazón. O pétreo.
Un abrazo
Hay algunos que fingen ser felices viviendo en un mundo de apariencias al óleo, o mejor, al agua fuerte...
Sir Gilbert, the tea is on the table
Ariovisto y etc, etc, etc...
yo soy anti-pedante y anti-intelectual. Los autores "consagrados" escriben libros para repelentes como ellos, pero los repelentes a los que les gustan son aún peores que los propios autores.
Por supuesto solo es una generalización. Pero es lo que pienso.
Los tiranos atacan a los intelectuales porque "los intelectuales son los que piensan" decía una bloguera no hace mucho. En realidad los intelectuales son tan listos o tan burros como el común de los mortales, pero se encuentran más cerca del poder y eso les facilita vivir del cuento. Y si no pueden vivir del cuento tratan de cambiar ese poder por otro. "Intelectuales", ¡puajj! Simples vividores leídos.
Seguro que las mayores tonterías de la humanidad las han dicho los intelectuales, porque lógicamente son los que tienen un micrófono en la boca para demostrar al mundo lo patéticos que son.
Un abrazo
Elena Nito Del Bosque
Nieta carnal de Damayante
(No es coña pero con las palabrejas estas que salen en la verificación se podría crear un microcosmos que ríete tú del Tolkien: "pargemi" "materef", "tarfusa", alciemy, "pascaro"; debe ser élfico, tú.
no es malo tener buena memoria y haber leído mucho. Lo malo es a) confundir eso con cultura/inteligencia o b) sentirse por eso por encima de alguien.
No me parece mal que hagas conexiones con los libros que has leído. No hay por qué avergonzarse de lo que eres o de lo que te gusta. Si hablásemos de películas serías admirado, pero hablando de libros ¿eres un pedante? No tiene sentido.
Pero siguiendo con la analogía cineasta, tu opinión y la mía valen lo mismo a la hora de calificar una película como buena o mala. Y lo mismo pasa con los libros: que el escritor tenga laureles solo sirve para que venda más fácil, pero si su obra me parece un ladrillo, ya pueden venir mil críticos literarios a contarme sus penas que me dará igual.
¡Viva Pérez Reverte!
¡Viva Vázquez-Figueroa!
Abajo la academia de los aburridos dinosarurios de la lengua (una casta de fracasados que se ponen medallas unos a otros con nuestro dinero).
Un abrazo
Ay, sir Gilbert, no "molesta" quien quiere, sino quien puede, y vos, milord, ni podéis, ni creo que queráis.
Yo sí que soy amigo tuyo.
Lo dicho, dejémoslo en Ariovisto
(un nazi pasado de moda,ario-visto juju)
Mi autora favorita es Victoria Holt, me cuesta mucho conseguir sus libros, pero poco a poco los oy leyendo todos.
Por cierto, pienso que no es malo leer mucho, lo malo es.... !No enterarse de nada de lo que uno lee!!, y hacersse un follçón, o quedarse en la superficie y de por si contaminada muchas veces, (como le puede pasar a LSSALLE...). Ay si es que no pierdo una...
Un abrazo amigo!!. He pensado hablar en este blog de cosas de la vida, y en aquél otro de polítioca, de quejas, voy adaptándolos ambos, más bien este a ratos. bss
habrás pensado que me había vuelto gilipollas o loco para interpretar tu comentario como lo que no era. Supongo que al ir el mío justo detrás del tuyo y no citar yo el comentario no aceptado se podía prestar a confusión.
En fin, cosas que pasan.
Un abrazote
y mostrar pancartas en las que ponía VIVA LA INTIFADA, ¿te parece muy pacífico?
Como dice Federico, es bueno que los malos sean tan claramente los malos.
Un abrazo
"la estupidez humana es infinita", por lo que nunca deja de sorprendernos.
Al menos el resto de los animales no se creen inteligentes.
Un abrazo
Uno se congratulaba de que la Universidad de Sevilla protestara por los ataques israelíes, argumentando que centros educativos con los que colaboran estaban siendo dañados. Digo yo que a lo mejor deberían colaborar también con alguno de Israel para que las víctimas israelíes les importasen algo.
Otro decía que esto era una cuestión de número: Israel mata más, luego es más mala. Te prometo que lo he leído y en esencia decía eso.
En fin, me remito a mi comentario anterior.
Un abrazo
uno de los posts lo he localizado: http://julitros.wordpress.com/2009/01/12/comunicado-de-la-universidad-de-sevilla/
Es historia viva de la infamia.
El otro no lo he encontrado, aunque lo he buscado.
Un abrazo
La señora Mariana,
con la pata galana.
les va diciendo...
"Hasta mañana"
Ariovisto I y V de Alemania o aledaños.
(clave de verif: "blessi") God blessiu, pues)
Como Joseba Koldo significa José Luis, el significado más correcto de la frase sería "Hola, soy José Luis, un hombre de paz".
Espero haber aclarado sus dudas.
Reciba un saludo afectuoso.